jueves, 31 de octubre de 2013

Edición ilustrada de Estudio en escarlata

Fernando Vicente dibuja la primera historia de Sherlock Holmes.




Una deliciosa edición ilustrada de Estudio en escarlata es la última propuesta de Nórdica Libros: la primera entrega de la serie de Sherlock Holmes ideada por Arthur Conan Doyle, ilustrada por Fernando Vicente, nada menos. Y en gran formato.
Publicada en 1887, Estudio en escarlata es la primera entrega de la serie, en la que John H. Watson inicia las memorias de sus aventuras. Todo comienza cuando él y Holmes van a compartir casa en la ya famosa dirección del 221B de Baker Street. Allí, Watson convivirá con las excentricidades de Holmes y será testigo de su asombrosa habilidad para obtener información sobre todo lo que le rodea. Aturdido en ocasiones por la personalidad del detective, Watson se verá, sin embargo, deslumbrado por su genialidad.
Fernando Vicente ha recreado este caso y ha dado vida gráfica a estos dos míticos personajes.
Tras la publicación de El perro de los Baskerville, con ilustraciones de Javier Olivares, Nórdica sigue con el propósito de publicar todas las novelas de Conan Doyle que tienen como protagonistas al detective más famoso de todos los tiempos,Sherlock Holmes, y a su inseparable doctor Watson.
Arthur Conan Doyle (Edimburgo, 1859 - Crowborough, Reino Unido, 1930). Novelista británico. De familia escocesa, estudió en las universidades de Stonyhurst y de Edimburgo, donde concluyó la carrera de Medicina. Entre 1882 y 1890 ejerció como médico en Southsea (Inglaterra). En 1887 publica Estudio en escarlata, que se convertiría en el primero de los sesenta y ocho relatos en los que aparece uno de los detectives literarios más famosos de todos los tiempos, Sherlock Holmes. En un momento de auténtica inspiración, basándose en el modelo de don Quijote y Sancho que tantos novelistas han utilizado, el autor creó al doctor Watson, un médico leal pero intelectualmente torpe que acompaña a Holmes y escribe sus aventuras. En julio de 1891 empezó a publicar en la revista Strand Magazine las andanzas de su personaje.
Fernando Vicente (Madrid, 1963). Comienza su trabajo de ilustrador a principios de los años 80 colaborando en la desaparecida revista Madriz. Gana el Laus de oro de ilustración en 1990. Colabora asiduamente con el suplemento cultural Babelia del diario El País desde el que muestra su trabajo más literario cada sábado y donde ha ido perfilando su actual estilo como ilustrador. Con este trabajo ha conseguido tres Award of Excellence de la Society for News Design.
http://www.estandarte.com

miércoles, 30 de octubre de 2013

IAN MCEWAN "LAS AGENCIAS DE INTELIGENCIA HARÁN TODO LO POSIBLE POR ESPIAR"

El escritor británico explora en «Operación Dulce», su última novela, el papel del espionaje en la cultura.

Ian McEwan: «Las agencias de inteligencia siempre harán todo lo posible por espiar»

Ni a propósito habría escogido Ian McEwan (Aldershot, 1948) mejor día para presentar su última novela, esa “Operación Dulce”(Anagrama) con la que retrocede hasta la Inglaterra de los setenta, con la Guerra Fría haciendo estragos y el espionaje en su máximo apogeo, para colarse en el MI5 y relatar la historia de Serena Frome, una joven y brillante estudiante de Matemáticas reclutada por lo agencia de inteligencia británica.
Así, el azar, con la inestimable ayuda de la actualidad, ha querido que mientras la Fiscalía abría diligencias informativas sobre el supuesto espionaje masivo de los servicios de inteligencia de EE.UU. en España, el escritor británico recordase en Barcelona las inyecciones económicas que la CIA realizó entre los 40 y los 60 para "promover la cultura occidental"
"Todo lo hicieron con muy buen gusto, con giras de orquestas y financiando revistas... Querían proponer el pluralismo y la diversidad cultural, pero lo más estúpido de todo es que lo hicieron en secreto", ha explicado McEwan, en cuya última novela su protagonista recibe el encargo de crear una fundación que, bajo el pretexto de ayudar económicamente a novelistas prometedores, se encargue de airear propaganda anticomunista.
Una sutileza que constrasta con ese espionaje masivo aparentemente orquestado por los Estados Unidos que McEwan encuentra"absolutanente extraordionario. "Todavía no sabemos todos los detalles, pero la historia de la NSA es extraordinaria -ha explicado- 'The New York Times' y 'The Guardian' tiene información suficiente como para irla dosificando durante los próximos dos años, y los altos funcionarios de Estados Unidos han de tener mucho cuidado con lo que niega, porque no saben qué tiene Snowden en realidad".
"El argumento cultural ya no existe", ha añadido McEwan, para quien informaciones como las que ha aireado el exinformático de la CIA exiliado en Rusia confirman la idea de que la única razón de ser agencias como la NSA es, precisamente, el espionaje. "Las agencias de inteligencia harán siempre todo lo posible por espiar. Ni siquiera se preguntarán por qué. Si puede espiar, lo harán", ha asegurado.

martes, 29 de octubre de 2013

Ronaldo Menéndez: Cómo escribir cuentos

El autor cubano nos da sus claves para lograr buenos relatos.


Ronaldo Menéndez Cinco golpes de genio - Cómo escribir cuentosSeguramente Cinco golpes de genio (Técnicas fundamentales en el arte de escribir cuentos) no te convertirá en un gran escritor, pero puede ayudarte en el camino. En este pequeño manual, el autor cubano Ronaldo Menéndez aborda con gracia y sencillez las técnicas básicas para llegar a escribir buenos cuentos.
Para ello, echa mano de los grandes. Sus páginas son un viaje a través de relatos geniales escritos por autores que revolucionaron el género, tales como Julio Cortázar, Jorge Luis Borges, J. D. Salinger, Ryunosuke Akutagawa o Ambrose Bierce. Estos son, nada menos, los maestros elegidos por Ronaldo Menéndez para tal empresa.
Técnicas básicas como el tratamiento del tiempo o el punto de vista, junto a otras más avanzadas como las cajas chinas o las multiperspectivas, encuentran en Cinco golpes de genio un espacio de análisis dirigido a la enseñanza. La gran virtud que tiene este libro es la sencillez, amiga de la cabal comprensión y el óptimo entrenamiento en el arte del relato. Cada capítulo está elaborado de manera amena, con humor, sin abandonar el rigor del análisis. Si quieres escribir relatos, este puede ser un buen camino.
Ronaldo Menéndez (La Habana, 1970) es Premio Casa de las Américas de cuento (1997) y Premio Lengua de Trapo de novela (2009). Es autor de Alguien se va lamiendo todo (Ediciones Unión, La Habana 1996), El derecho al pataleo de los ahorcados (Lengua de Trapo 1997), La piel de Inesa (novela, Lengua de Trapo 1999), De modo que esto es la muerte (Lengua de Trapo 2003), Las bestias (Lengua de Trapo 2006), Río Quibú (Lengua de Trapo 2008) y Covers, en soledad y compañía (Páginas de Espuma 2010). Actualmente reside en Madrid, donde colabora con publicaciones periódicas y dicta cursos de creación literaria.

viernes, 25 de octubre de 2013

PREMIO NACIONAL DE HISTORIA DE ESPAÑA

El galardón, concedido por el Ministerio de Cultura, está dotado con 20.000 euros

José Ángel Asiaín, Premio Nacional de Historia de España por su obra «La financiación de la Guerra Civil española»
 La obra «La financiación de la Guerra Civil española», de José Ángel Asiaín ha sido distinguida con el Premio Nacional de Historia de España correspondiente a 2013, otorgado por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.
El jurado ha decidido conceder este galardón «por tratarse de una sólida obra de investigación, bien estructurada, que abre nuevas líneas de estudio, aportando documentación inédita y que es producto de muchos años de trabajo».
El libro «La financiación de la Guerra Civil española», publicado por la Editorial Crítica, culmina veinte años de estudios sobre las finanzas de la guerra civil española, nos ofrece una amplia y detallada visión de conjunto, que abarca desde los inicios del conflicto, la preparación de la sublevación y las primeras ayudas financieras y sus protagonistas, hasta las finanzas de las dos zonas en conflicto.
Examina también la preparación de exilio y su desarrollo desde el punto de vista financiero. Presta atención especial a los ajustes que hubo que hacer en la posguerra en el sistema financiero, y la unificación monetaria con la Ley de Desbloqueo.
El Premio Nacional de Historia de España tiene por objeto reconocer y estimular la importante labor de estudio e investigación histórica que viene realizándose en los temas relacionados con la historia de nuestro país. El galardón está dotado con 20.000 euros.

Biografía

José Ángel Sánchez Asiaín es Economista, Licenciado por la Universidad de Deusto, Doctor en Economía (Dinero y Finanzas) por la Universidad Central de Madrid, catedrático de Hacienda Pública y Derecho Fiscal de la Universidad de Valladolid y más tarde de la de Bilbao. Es, además, Doctor Honoris Causa por la Universidad del País Vasco, por la Universidad Miguel Hernández de Elche y por la Universidad de Valladolid.
Académico de la Real Academia de las Ciencias Morales y Políticas, de la Real Academia de la Historia, y de la Real Academia de Ciencias Económico-Financieras de Barcelona, es también académico de honor de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y presidente de la delegación española de la Academia Europea de Ciencias y Artes.
Como economista, fue director del Servicio de Estudios del Banco de Bilbao (1954-1962), así como director general y presidente de su consejo de administración entre 1966 y1988. Ha sido también presidente del Banco Bilbao Vizcaya (1988-1990), consejero del Istituto per le Opere di Religione (IOR) del Vaticano (1989-2006), presidente del Centro de Investigación para la Inversión, Capital y Riqueza Nacional de España (1965-1969) y miembro del Consejo de Economía Nacional (1975-1980).
En la actualidad preside la Fundación Cotec para la Innovación Tecnológica y la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción, y espresidente de honor de la Fundación BBVA y del Colegio Libre de Eméritos.

jueves, 24 de octubre de 2013

Detrás del seudónimo se esconden dos mujeres. ¿Qué lee Amy Lab?



Cuestionario Amy LabAún no hace un año que os hablamos de Nunca digas nunca, el debut de Amy Lab, y ya tiene una nueva novela en las librerías: Pero a tu lado. Aunque más bien deberíamos decir “tienen”: tras el seudónimo Amy Lab no se esconde ningún fraude de tintes políticos (ay, Amy Martin de mis amores), sino dos mujeres dedicadas de lleno desde hace un tiempo a la literatura juvenil crossover, esa que se escribe pensando en un género y acaba desbordándose y siendo leída por públicos mucho más amplios.
María Cereijo y Ana Alejandro son Amy Lab. Amigas desde la infancia, decidieron juntar fuerzas para escribir a cuatro manos, robando tiempo a sus quehaceres (María es periodista e imparte talleres de escritura creativa y clubes de lectura; Ana es lingüista), y vuelven a la carga con Pero a tu lado, la historia de una chica divertida, inteligente y muy querida por sus amigos (pero con poco éxito amoroso) que verá cómo su vida da un vuelco con la llegada de un nuevo vecino, el atractivo, desconcertante, duro y salvaje Oliver.
Hemos querido conocer los gustos literarios y las costumbres lectoras de Amy Lab (María Cereijo y Ana Alejandro), y esto es lo que nos contaron…
Pero a tu lado de Amy Lab¿Cuántos libros lee al año? O al mes, si le resulta más sencilla la cuenta…
María: Entre 8 y 10 al mes.
Ana: Tengo que leer mucho por trabajo. Por placer, depende un poco del tiempo de que disponga, pero creo que sale una media de 4 o 5 al mes.
Sea valiente. Confiésenos alguna lectura pendiente que le sonroje admitir.
María: En busca del tiempo perdido de Proust. Reconozco el valor de la magdalena, pero es un somnífero excelente.
Ana: El Príncipe de Maquiavelo. Lo he intentado incontables veces, pero siempre lo abandono.
¿Qué libro le habría gustado escribir?
María: El diario de Adán y Eva, de Mark Twain
Ana: Muchos. Pero si tuviera que elegir uno, tal vez sería La Regenta. Creo que es una novela perfecta. O La casa de Bernarda Alba, en teatro.
¿Recuerda el primer libro que leyó?
María: Pues no… Lo más antiguo que recuerdo es la saga de El Pequeño Vampiro de Angela Sommer-Bodenburg, Momo
Ana: El primero, no. Recuerdo libros del Barco de Vapor: Fray Perico y su borrico, Las aventuras de Vania el forzudo y muchos otros.
María: ¡Eh! Es verdad, Fray Perico y su borrico. ¡Genial!
¿Cómo ordena los libros de su biblioteca?
María: Sólo tengo colocados juntitos los de relato en varias baldas. El resto según van cayendo y para optimizar el espacio… Concepto librería-caos. A veces, hasta encuentro algo a la primera.
Ana: Lamentablemente, el concepto “ordenar” no va conmigo. Los voy apilando en la librería según llegan y así se quedan por los siglos de los siglos.
¿Cuál es su lugar ideal para leer?
María: La cama
Ana: Un lugar tranquilo y, si hay una vista bonita, mejor que mejor.
¿Y para escribir?
María: Una aldeíta gallega (en Orense) de la que eran mis abuelos. Un sitio tranquilo, entre castaños, con poca cobertura…
Ana: El lugar no me importa demasiado, pero tiene que ser de noche y haber silencio.
Se lo rogamos, responda a esta absurda pregunta: hay una inundación y todos sus libros van a morir, ¿qué tres salvaría?
María: ¿Sólo tres? A la isla al menos me dejan llevarme 10… Salvaría una edición preciosa llena de mordiscos de ratón de Firmin de Sam Savage, los cuentos completos de Poe (la edición de Edhasa traducidos por Cortázar) y losCuentos completos de Roald Dahl.
Ana: A medida que viera entrar el agua, me maldeciría por no haberme comprado un ebook cuando tuve la oportunidad. No sé cuáles elegiría, pero ninguno que tratara sobre inundaciones, eso seguro.
¿Tiene lector de ebooks? ¿Le gusta el libro electrónico?
María: Sí, tengo un kindle. El libro electrónico es cómodo sobre todo para el bolso y para viajar en low cost, pero sigo prefiriendo el papel. Leer también es una experiencia sensorial. Me gusta el tacto de las hojas, el olor, ver los colores de las cubiertas, doblar las esquinitas de alguna página que me gusta… Eso no se puede hacer con un libro electrónico.
Ana: Yo no tengo. Sigo siendo muy clásica a la hora de leer.
Recuerde alguna anécdota curiosa que haya tenido con algún lector.
Amy Lab: Muchas lectoras de Nunca digas nunca nos escriben en privado para que les demos el teléfono de Marcos. Y ahora empieza a ocurrir lo mismo con Oliver (empezando por nuestra editora).
¿Qué está leyendo estos días?
María: El tercer hombre y El guardián entre el centeno (son dos relecturas para mis clubes de lectura) y La banda que escribía torcido de Marc Weingarten, editada por Libros del K.O.
Ana: El llano en llamas de Juan Rulfo, Las joyas del paraíso de Donna Leon yDonde las mujeres de Álvaro Pombo.
Si no hubiese sido escritora, ¿qué le habría gustado ser?
María: Estudié periodismo porque quería ser como Woodward y Bernstein… Pero la realidad periodística actual es otra cosa. También durante mucho tiempo dije que me hubiera gustado ser Melissa Mathison, la guionista de ET, que además estuvo casada un montón de años con Harrison Ford…
Ana: Me habría encantado tener buen oído y componer, tocar el violín, el piano, la guitarra... Cualquier cosa con la que pudiera crear música.

miércoles, 23 de octubre de 2013

Moccia habla del amor que "de repente falta"

Una novela que narrara el romance entre una chica española y un joven italiano es el nuevo trabajo del escritor.


Una novela que narrara el romance entre una chica española y un joven italiano era una idea que Federico Moccia, el fenómeno editorial de la literatura juvenil romántica, tuvo hace unos años y que ahora ha cristalizado en Ese instante de felicidad, donde habla de "ese amor que, de repente, falta".
La expectación que entre los jóvenes lectores suele levantar la presencia de Moccia se ha visto acrecentada en esta ocasión en España ya que, además de presentar su último libro, el escritor italiano se dispone a elegir estos días la ciudad española que será escenario de su próxima novela, continuación de Ese instante de felicidad (Planeta).
"Hay mucha expectación porque quieren saber cuál de los tres lugares que hemos elegido tras un concurso que hemos organizado será el protagonista de la novela", explica el autor en una entrevista con Efe.
Hondarribia (Guipúzcoa), Vic (Barcelona) y Vejer de la Frontera (Cádiz) son las tres "candidatas" a ser el escenario de la continuación de la historia que protagonizan el joven italiano Nicco y la española María, que se conocen en Roma en "Ese instante de felicidad", y que se publicará en la primavera de 2014.
Federico Moccia (Roma, 1963) dedicará los próximos días a conocer las tres localidades "y según las características singularidades de cada uno, Nicco elegirá el lugar al que va a ir", indica el escritor, que asegura desconocer en que se basará la selección.
Se trata de buscar "el mejor lugar desde el punto de vista de la narración", aunque, por supuesto, indica, "todas las localidades son bonitas y todas podrían ir bien".
"Hace tiempo visité Murcia y me encantó esta ciudad que no conocía y pensé que los italianos muy a menudo vienen a España y en realidad no conocen el país, por lo que pensé en escribir un libro en alguna de estos sitios", recuerda el escritor.
Y también barajaba desde hace años el argumento de una novela con una chica española que viajara a Roma, y un joven italiano que fuera luego a buscarla a España. Es así como ha surgido Ese instante de felicidad, cuyo título inicial fue La extranjera.
En su novela más "intimista", Moccia presenta a un joven Nicco cuyo padre ha muerto recientemente y cuya novia le ha dejado, un personaje a través del cuál se refleja la forma en la que cada persona afronta las dificultades.
"Nicco nos enseña como está viviendo esas circunstancias y cómo el dolor es siempre difícil de afrontar. A veces en una familia, nadie vuelve a hablar de ese dolor y permanece como una capa que lo cubre todo", indica Moccia, que sostiene que es en las dificultades "donde surgen las capacidades de las personas".
Por eso, explica el autor italiano, "este libro es una invitación a vivir con plena conciencia cada instante de felicidad y a no infravalorar los momentos de ligereza, como decía Italo Calvino".
Moccia, que sostiene que ha sido con la madurez cuando ha aprendido a vivir el momento presente, recuerda la forma que tuvo su padre de enseñarle no diciéndole cómo tenía que vivir sino contándole cómo había reaccionado ante diferentes situaciones de la vida.
Desde la desilusión del primer amor que relató en A tres metros sobre el cielo, las ganas de volver a enamorarse en Tengo ganas de ti o la diferencia generacional en Perdona si te llamo amor, Moccia dice no entender cómo se pueden resumir sus novelas diciendo que "siempre habla de amor".
"Hay tantas clases de amor...", dice este exitoso autor de novela romántica juvenil, conocido por los miles de candados que jóvenes de italianos enamorados pusieron en las farolas del puente Milvio de Roma emulando a los protagonistas de su segunda novela, práctica que se extendió luego a otros lugares.
"El de este libro es el amor que, de repente, falta, la dificultad del amor, la vida que de pronto te quita, al igual que te ha dado", señala Moccia, que alude así al espíritu de la película norteamericana Cuando Harry encontró a Sally.
¿Y qué es lo que encuentran millones de jóvenes lectores de todo el mundo en sus novelas?: "Los jóvenes con mis libros se divierten, se emocionan, se ríen y a veces lloran. Encuentran fragmentos de su vida o cosas que les han pasado alguna vez. Entran en un mundo que les pertenece", dice.

martes, 22 de octubre de 2013

Plagios literarios: los casos más famosos

Los plagios más famosos de la literatura reciente es un tema espinoso, nos metemos en camisa de once varas, lo sabemos, porque a veces no es fácil diferenciar el plagio del homenaje, la intertextualidad o la burda copia… Pero la noticia sobre elplagio del que Guillermo Sheridan acusó recientemente a Sealtiel Alatriste nos hizo despertar las ganas de recordar los casos más importantes de los últimos años.
Dice la RAE, que plagiar es copiar en lo sustancial obras ajenas, dándolas como propias. El delito de plagio atenta contra los derechos fundamentales que dimanan de la creación de una obra. El plagio lesiona las facultades morales del autor sobre su creación, al tiempo que perjudica también los derechos de explotación. Del mismo modo, el delito de plagio atenta contra el interés público en sus diversas facetas en la medida en que la obra plagiada, por no ser original, engaña al consumidor con la suplantación se pierde el vínculo que existe entre el verdadero autor y el fruto de su espíritu creador. 
Respecto a esos casos de plagios literarios más recientes, hemos recogido los siguientes:

Los plagios de Alfredo Bryce Echenique
El escritor peruano Alfredo Brye Echenique fue acusado en 2008 de haber plagiado 16 artículos periodísticos de medios como La VanguardiaEl periódico de Extremadura o la revista literaria Jano. Bryce Echenique fue encontrado culpable por el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual peruano, con una sanción de más de 57.000 dólares. El autor se defendió esgrimiendo que el plagio es una forma de halago, para más tarde confesar su culpa, pero entretejiendo su acción con una compleja trama de conspiraciones fujimoristas y errores informáticos cometidos por su secretaria.

El plagio de Camilo José Cela
Sobre la novela de Camilo José Cela La cruz de San Andrés, que ganó el premio Planeta en 1994, sobrevuela la sospecha de plagio. La escritora Carmen Formoso denunció que la obra de Cela se parecía demasiado a la suya, Carmen, Carmela, Carmiña, que también concursó para ese premio, y el caso está aún en tribunales. Como Cela murió en el 2002, el único acusado en el caso es el consejero delegado del grupo editorial Planeta, José Manuel Lara Bosch, en tanto que responsable de la difusión de la novela.
La parte acusadora argumenta que la editorial proporcionó el original a Cela. En 2009, la jueza que instruye el caso declaró que existían indicios de delitos contra Lara, con dos argumentos: que Formoso presentó su obra el 2 de mayo y Cela el 30 de junio, el último día de plazo, y el contenido del informe pericial elaborado por Luis Izquierdo, catedrático de Literatura española de la Universidad de Barcelona, en el que se concluye que la obra de Cela es un supuesto de transformación, al menos parcial, de la obra original.

El plagio de Carlos Fuentes
El mexicano Carlos Fuentes recibió la acusación de plagio en 1995 por parte del también escritor Víctor Celorio. Según este, pueden encontrarse en Diana o la cazadora solitaria (1994) unas 110 coincidencias textuales y varios personajes excesivamente similares a los de la obra de Celorio El unicornio azul, de 1985, difundida en una tirada reducida a costa del propio autor. Finalmente un juez federal desechó el caso y dio la razón a Carlos Fuentes y a la editorial Alfaguara.

El plagio de José Saramago
El escritor y periodista mexicano Teófilo Huerta Moreno acusó a José Saramago deplagio, implicando en el caso a Sealtiel Alatriste, al que parecen perseguir las acusaciones de practicar la copia. Huerta Moreno aseguró que Alatriste, por entonces director de Alfaguara México, le había hecho llegar a José Saramago su relato “¡Últimas noticias!”, y este se había inspirado en él para Las intermitencias de la muerte. El caso quedó abierto, pero el nobel portugués declaró que no vio y ni siquiera tocó con la punta de los dedos el cuento del reclamante, y que si dos autores tratan el tema de la ausencia de la muerte, resulta inevitable que las situaciones se repitan en el relato y que las fórmulas en que las mismas se expresen tengan alguna semejanza.

El plagio de la traducción de Manuel Vázquez Montalbán
Vázquez Montalbán fue condenado en 1990 a pagar tres millones de pesetas, en concepto de perjuicio moral, al profesor de la Universidad de Murcia, Ángel Luis Pujante, por plagio en la traducción que éste había realizado de la obra de Shakespeare Julio César, nada menos. Lo que descubrió el plagio fue el descuido en borrar las pistas: en la traducción de Vázquez Montalbán se reproducían las mismas omisiones que en la de Pujante. El caso sentó jurisprudencia en los derechos de los traductores sobre sus textos.

El plagio de Ana Rosa Quintana
La popular presentadora de televisión Ana Rosa Quintana se lanzó al mundo de la narrativa en el año 2000 con un título que acabó siendo premonitorio: Sabor a hiel, publicado por Planeta. La acusación de plagio, párrafos y páginas enteras copiados de tres libros (a saber: Mujeres de ojos grandes, de Ángeles Mastretta; El pájaro canta hasta morir, de Colleen MacCullough y Álbum de familia, de Danielle Steele), era irrebatible. Ana Rosa Quintana envió una carta a los medios de comunicación pidiendo disculpas a los muchos lectores de su novela; Sabor a hiel vendió 100.000 ejemplares. El tema de los “negros” literarios se puso de moda, al conocerse que tras la redacción del libro se encontraba David Rojo, periodista y excuñado de Quintana.
Paradójicamente, en las páginas de agradecimientos del libro se podían leer estas palabras de la presentadora, refiriéndose a David Rojo: Gracias por las incontables horas que hemos trabajado en esta novela, por su meticulosa investigación y por todas las locuras que hemos quitado a la versión final del libro.

El plagio de Jorge Bucay
De las 270 páginas de Shimriti, del escritor argentino Jorge Bucay, 60 fueron copiadas casi textualmente de La sabiduría recobrada, de la filósofa española Mónica Cavallé. Así lo hizo saber ella y Bucay reconoció la copia en su revista Mente Sana: Un error absolutamente involuntario permitió que los textos de la profesora Mónica Cavallé fueran incluidos en Shimriti sin la correspondiente y merecida mención de su fuente, declaró Bucay. Todo quiso solucionarse por un simple error de entrecomillado, pero habría que plantearse hasta qué punto pertenece a un autor un texto con tantísima “participación” de otro…

Los plagios de Lucía Etxebarria

Ya no sufro por amor (2005), de Lucía Etxebarria, contenía párrafos enteros del artículo "Dependencia emocional y violencia doméstica", publicado por el psicólogo Jorge Castelló en 2004 en PsicocentroEtxebarria, fiel a su estilo, no dudó en declarar que esperaba que el escándalo ayudase a aumentar las ventas de su libro. Finalmente la disputa se solucionó por acuerdo económico (3.000 €) y el envío de un comunicado de la autora en el que reconocía un uso inadecuado de los materiales ajenos.
Pero no fue esta la única vez que se acusó a Lucía Etxebarria de plagio. Años antes, en 2001, la revista Interviú acusó a la autora de plagiar versos del poeta Antonio Colinas en su libro Estación de Infierno. Colinas quiso evitar polémicas:Sabía de la admiración de esta autora hacia mi obra, pero nunca hubiera pensado que se iba a materializar así. No pienso tampoco entrar en polémicas, declaró. La Justicia dio la razón a Interviú. En palabras del juez, “la revista dio información veraz, es decir, que la actora en el pleito judicial, Lucía Etxebarria, plagió a Don Antonio Colinas, prevaleciendo así la libertad de información (derecho de toda una colectividad) sobre el derecho individual del honor”.

El plagio de Agustín Fernández-Mallo

El pasado mes de octubre dimos a conocer que El Hacedor (de Borges), Remakehabía sido retirado de las librerías, por petición de la viuda de Jorge Luis Borges, María Kodama. Aunque a Fernández-Mallo no se le acusó de plagio, sino de insertar materiales protegidos por derechos de autor (El hacedor, de Jorge Luis Borges) dentro de una obra original, sin contar con el debido consentimiento de su propietaria, recuperó el eterno debate sobre el plagio y la intertextualidad.
El caso sigue abierto, pero lo cierto es que la novela de Agustín Fernández-Mallo ya no está en las librerías.

jueves, 17 de octubre de 2013

César Mallorquí, Premio Nacional de LIJ

César Mallorquí es el nuevo Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil, un premio dotado con 20.000 euros que, además, llama la atención sobre un género literario que a menudo recibe menos promoción de la que merece…
César Mallorquí Premio Nacional de Literatura Infantil y JuvenilCésar Mallorquí ha recibido el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenilpor su novela La isla de Bowen, “un canto a la aventura y homenaje a la literatura clásica, escrita con pasión, amenidad, humor e inteligencia y por la excelente construcción de sus personajes y sus tramas”, en palabras del jurado.
La isla de Bowen es un libro de aventuras al estilo de los de Julio Verne o Arthur Conan Doyle, con islas misteriosas, asesinatos, minerales preciosos, héroes y manuscritos medievales. Por esta obra fue galardonado con el Premio EDEBÉ 2012.
El Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil lo concede el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte para distinguir una obra de autor español, escrita en cualquiera de las lenguas oficiales del Estado y editada en España durante el pasado año 2012. La dotación económica del mismo es de 20.000 euros.
César Mallorquí (Barcelona, 1953) estudió Periodismo en la Universidad Complutense de Madrid y trabajó en La Codorniz y en la Cadena SER. Posteriormente, desempeñó diversos puestos en una agencia de publicidad norteamericana. La pared de hielo (Premio Alberto Magno 1992), El coleccionista de sellos (Premio UPC 19995), La casa del Doctor Pétalo (Premio Gigamesh 1996) y Las lágrimas de Shiva (Premio EDEBÉ 2002) son algunas de sus obras. 
El jurado estaba compuesto por Laura Gallego, ganadora en la edición 2012; Mª Teresa Carranza, ganadora en la edición de 2011; Darío Villanueva, por la Real Academia Española; Antón Palacio, por la Real Academia Gallega; Gemma Lienas, por el Instituto de Estudios Catalanes; Joseph Gregori Sanjuán, por la Organización Española para el Libro Infantil y Juvenil (OEPLI); Santiago Urbano Sánchez, por la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE); Beatriz García, por la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE); Rafael Soler, por la Asociación Colegial de Escritores de España (ACE); Daniel Leal, por el Centro de Estudios de Género de la UNED; y Javier Fierro, por el ministro de Educación, Cultura y Deporte. María Teresa Lizaranzu, directora General de Política e Industrias Culturales y del Libro, presidió el Jurado y Mónica Fernández, subdirectora General de Promoción del Libro, la Lectura y las Letras Españolas, actuó como vicepresidenta; además de Alicia García, jefe del Servicio de Promoción de las Letras, ejerció de secretaria. 

miércoles, 16 de octubre de 2013

Premio Planeta 2013 para Clara Sánchez


Clara Sanchez Premio Planeta 2013 y Gonzalez-Sinde finalistaClara Sánchez por El cielo ha vuelto es la ganadora del Premio Planeta 2013. Ángeles González-Sinde ha quedado finalista. El cielo ha vuelto cuenta la historia de una exitosa modelo de pasarela que descubre que la terrible revelación que una vidente le hizo tiempo atrás se está convirtiendo en realidad, y que alguien desea su muerte y le está haciendo la vida imposible. La ganadora, Premio Nadal 2010 con Lo que esconde tu nombre, describe una relación tóxica con un pintor fracasado, con una protagonista que experimenta una metamorfosis personal desde la candidez hasta aprender de la vida con dosis de intriga y sentimiento. 
El buen hijo, según ha contado Ángeles González-Sinde, es la historia de un hombre varado en su vida, un buen ciudadano que siente un día que haber seguido siempre todas las reglas, ser ese "buen hijo", no es suficiente.
Clara Sánchez nació en Guadalajara, pasó su infancia en Valencia y acabó estableciéndose en Madrid, donde reside en la actualidad y donde estudió Filología Hispánica en la Universidad Complutense. Tras desempeñar otros trabajos, enseñó en la universidad durante varios años, en los que además participó regularmente en el programa de TVE Qué grande es el cine y colaboró en distintos medios. En 1989 publicó la novela Piedras preciosas, a la que siguieron No es distinta la noche(1990), El palacio varado (1993), Desde el mirador (1996), El misterio de todos los días (1999), Últimas noticias del paraíso, por la que recibió el Premio Alfaguara de Novela 2000, Un millón de luces (2004) Presentimientos (2008) y Lo que esconde tu nombre, que obtuvo en 2010 el Premio Nadal de Novela y la ha consolidado entre los lectores tanto en España como en Italia, con cerca de 500.000 ejemplares vendidos en ambos países. Ha sido galardonada con el premio Germán Sánchez Ruipérez al mejor artículo sobre Lectura publicado en 2006, y su obra está en proceso de traducción en 15 países.
Ángeles González-Sinde (Madrid, 1965). Guionista y directora española, es licenciada en Filología Clásica por la Universidad Complutense de Madrid. En 1992 cursó el Máster de Guión Cinematográfico de la Universidad Autónoma de Madrid, para más tarde trasladarse a Los Ángeles, donde reside durante tres años y obtiene un Master of Fine Arts en Cine por el American Film Institute. Regresa a España en 1996 y trabaja como guionista en algunos episodios de series como La casa de los líos, A las once en casa y Cuéntame cómo pasó, con Alberto Macías. Colabora con Ricardo Franco en la elaboración de varios guiones entre los que destaca La Buena Estrella(1997) por el que ambos reciben el Premio Goya al Mejor Guión. 
Adapta la novela de Belén Gopegui La conquista del aire con Las razones de mis amigos (2000), que dirige Gerardo Herrero. En colaboración con el guionista Alberto Macías escribe Antigua vida mía (2001), adaptación de la novela de Marcela Serrano y coproducción hispano-argentina dirigida por Héctor Olivera. Debuta escribiendo la obra teatral Las razones de mis amigos (2001) y se estrena como directora de cine con La suerte dormida (2003), película con la que obtiene, entre otros, el Premio Goya a la Mejor Dirección Novel.
Fue presidenta de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de España desde el año 2006 hasta el 7 de abril de 2009, cuando se incorpora al Ministerio de Cultura como ministra, en cuyo mandato impulsó una serie de medidas contra la piratería en Internet, la llamada ley Sinde, que fueron muy criticadas por una gran masa de internautas. Durante estos años escribe obras infantiles como Rosanda y el arte de birli-birloque (2006), Premio Edebé de Literatura Infantil.

viernes, 11 de octubre de 2013

ALICE MUNRO, PREMIO NOBEL DE LITERATURA

Es la primera canadiense en ganarlo, y una gran alegría para nosotros.



Alice Munro Premio Nobel de Literatura 2013Alice Munro ha ganado el Premio Nobel de Literatura, una concesión que nos alegra de verdad. Si bien otros años el Premio Nobel nos ha servido para descubrir a nuevos autores, el de 2013 lo recordaremos por haber hecho justicia sobre una autora grande entre las grandes. Si aún no has leído nada suyo, aprovecha la noticia para sumergirte en sus historias.
El jurado del Premio Nobel de Literatura ha declarado que la elige por su "armonioso estilo de relatar, que se caracteriza por su claridad y realismo psicológico".
Alice Munro es la primera escritora (y escritor) canadiense que se hace con elPremio Nobel de Literatura.
Alice Munro nació en 1931 en Wingham (Canadá) y se licenció en la Universidad de Western Ontario. En la actualidad está considerada como una de las principales escritoras actuales en lengua inglesa y una de las maestras mundiales del relato contemporáneo. Es autora de doce volúmenes de relatos, dos antologías y una novela. A lo largo de su carrera ha recibido numerosos premios de prestigio, entre los que cabe destacar el Governor General’s Award de Canadá, que le ha sido concedido en tres ocasiones, el W.H. Smith Prize, el National Book Circle Critics Award de los Estados Unidos, el PEN/Malamud Award for Excellence in Short Fiction, el Rea Award for the Short Story, el Giller Prize, el Trillium Prize y el Libris Award. Y ahora, el más deseado, el Premio Nobel de Literatura.
Conocida como la “Chejov canadiense” (sus relatos breves se centran en las relaciones humanas analizadas a través de la lente de la vida cotidiana) ella misma se declara en deuda con autoras de la talla de Flannery O’Connor, Katherine Anne Porter y Eudora Welty. Actualmente la autora vive parte del año en Clinton, Ontario, y parte en Comox, en la Columbia británica.

viernes, 4 de octubre de 2013

La alta literatura es gimnasia para el cerebro

El trabajo que Science publica este jueves hace diana en el epicentro de la más profunda cuestión en la estética literaria. ¿Por qué El código Da Vinci de Dan Brown puntúa menos que El americano impasible de Graham Greene en ese concurso para ascender al parnaso? ¿En qué sentido es Arturo Pérez Reverte menos literario que Javier Marías? ¿Por qué discutieron Carlos Ruiz Zafón y Antonio Muñoz Molina? Pues bien, he aquí una respuesta: mirad al cerebro. Leer ficción literaria recluta las áreas cerebrales implicadas en la emoción social: las que distinguen una sonrisa sincera de una falsa, detectan si alguien se siente incómodo o evalúan las necesidades emocionales de familiares y amigos. La ficción popular (como las novelas de espías o de amor y lujo) no lo hace, y la estantería de no ficción tampoco lo consigue.
Las lecturas literarias también son únicas en que estimulan la teoría de la mente, la facultad de ponerse en la piel del otro. La razón, según publican en Science los científicos de la Nueva Escuela de Investigación Social en Nueva York, es que la alta literatura nos obliga a expandir nuestro conocimiento de las vidas de otros, y a percibir el mundo desde varios puntos de vista simultáneos.
Los resultados de los científicos de Nueva York ofrecen, seguramente por primera vez en la historia de la crítica literaria, un criterio objetivo para cuantificar “el valor de las artes y la literatura”, como dice su institución. La Nueva Escuela de Investigación Social se fundó en 1919 con el espíritu de promover la libertad académica, la tolerancia y la experimentación. Publicar una investigación en Science es seguramente una culminación de ese programa. Su trabajo muestra que “leer ficción literaria estimula un conjunto de capacidades y procesos de pensamiento fundamentales para las relaciones sociales complejas, y para las sociedades funcionales”.
El psicólogo Emanuele Castano y su estudiante de doctorado David Comer Kidd han consultado a críticos e historiadores de la literatura para dividir el espectro continuo y diverso de la expresión literaria en solo tres categorías: ficción literaria, ficción popular y no-ficción.
Los voluntarios —siempre los hay en las investigaciones de psicología experimental, y suelen ser estudiantes de psicología sedientos de créditos— leyeron textos de esos tres géneros y se sometieron a todo tipo de mediciones perpetradas por Kidd y Castano. Los psicólogos estaban interesados sobre todo en su teoría de la mente, la habilidad de adivinar los pensamientos de otros, sus intenciones y emociones más ocultas. Este ejercicio de adivinación es algo que todos practicamos continuamente, de un modo más o menos consciente, pero unas personas lo hacen mejor que otras.
Una de estas pruebas es leer la mente en los ojos. Los participantes miran a fotografías de actores en blanco y negro y tienen que adivinar la emoción que están expresando. ¿Fácil? Pues seguro que hay alguien que lo hace mejor que usted. Otra prueba se llama el test de Yoni, y trata de medir a la vez las habilidades de percepción cognitiva y emocional de los voluntarios. “Hemos usado diversas medidas de la teoría de la mente”, dicen Kidd y Castano, “para asegurarnos de que los efectos que vemos no son específicos de un tipo de medida, y acumular evidencias convergentes para nuestra hipótesis”.
En los cinco tipos de experimento, los psicólogos de Nueva York han comprobado que los voluntarios que fueron asignados (al azar) a leer los textos más literarios puntuaron más alto en las medidas de la teoría de la mente que los que leyeron ficción popular o ensayo. Estos dos últimos géneros, por cierto, puntuaron igual de mal en esas pruebas.
“A diferencia de la ficción popular”, concluyen los autores, “la ficción literaria requiere una implicación intelectual y un pensamiento creativo de sus lectores”. Así que ya lo saben: lean bien, queridos lectores.

jueves, 3 de octubre de 2013

David Bowie: 100 libros que hay que leer

Conocer la librería de alguien es asomarse a su yo más íntimo...


¿Cuáles son los 100 libros que hay que leer, según David Bowie? No es que nos hayamos levantado hoy con esta extraña pregunta: surge a raíz de David Bowie is, la exposición que en estos momentos se puede visitar en la Art Gallery de Ontario (antes estuvo en el Victoria and Albert Museum de Londres) y que recorre el universo del mítico cantante pop.
Los 100 libros que hay que leer, según David BowieSegún el comisario de la muestra, Geoffrey Marsh, David Bowie es un “lector voraz”, conocido por leer ¡un libro al día! Qué envidia tener tanto tiempo para leer, Mr. Bowie…
Hemos echado un ojo a la lista de los 100 libros que hay que leer, según David Bowie, y descubrimos la pasión que el cantante siente por los libros editados en los 60, lo que no tiene nada de extraño, si tenemos en cuenta que su carrera se inició en 1967. Ahí están hitos de la contracultura como Última salida para Brooklyn de Hubert Selby Jr o Kafka Was The Rage: A Greenwich Village Memoir, de Anatole Broyard, 1993.
Pero lo que más nos sorprende es ¡que no elija ningún título anterior a 1945! Nos nos consta en ninguna información consultada que la selección tuviese que ceñirse a la segunda mitad del XX… ¿Será que Bowie considera que para ser rabiosamente contemporáneo sólo se puede leer así? Uhum…
En la lista de autores fundamentales para David Bowie están Truman Capote, Frank O’Hara, John Cage, Anthony Burgess, Ian McEwan, Yukio Mishima, Muriel Spark, Jack Kerouac, Lampedusa, Bruce Chatwin, Sarah Waters, Christopher Hitchens, Junot Diaz
En Estandarte creemos que meter las narices en la biblioteca de una persona es asomarse a su yo más íntimo, y eso es lo que nos ha permitido el comisario de David Bowie is. Aunque también estamos seguros de que Bowie esconde algunos ejemplares inconfesables en su biblioteca que no aparecen en este listado. Ésos que dibujarían el perfil completo del David Bowie lector. A falta de poder asomarnos a la biblioteca real del cantante, aquí queda la lista:
The Age of American Unreason, Susan Jacoby, 2008
The Brief Wondrous Life of Oscar Wao, Junot Diaz, 2007
The Coast of Utopia (trilogy), Tom Stoppard, 2007
Teenage: The Creation of Youth 1875-1945, Jon Savage, 2007
Fingersmith, Sarah Waters, 2002
The Trial of Henry Kissinger, Christopher Hitchens, 2001
Mr. Wilson’s Cabinet of Wonder, Lawrence Weschler, 1997
A People’s Tragedy: The Russian Revolution 1890-1924, Orlando Figes, 1997
The Insult, Rupert Thomson, 1996
Wonder Boys, Michael Chabon, 1995
The Bird Artist, Howard Norman, 1994
Kafka Was The Rage: A Greenwich Village Memoir, Anatole Broyard, 1993
Beyond the Brillo Box: The Visual Arts in Post-Historical Perspective, Arthur C. Danto, 1992
Sexual Personae: Art and Decadence from Nefertiti to Emily Dickinson, Camille Paglia, 1990
David Bomberg, Richard Cork, 1988
Sweet Soul Music: Rhythm and Blues and the Southern Dream of Freedom, Peter Guralnick, 1986
The Songlines, Bruce Chatwin, 1986
Hawksmoor, Peter Ackroyd, 1985
Nowhere To Run: The Story of Soul Music, Gerri Hirshey, 1984
Nights at the Circus, Angela Carter, 1984
Money, Martin Amis, 1984
White Noise, Don DeLillo, 1984
Flaubert’s Parrot, Julian Barnes, 1984
The Life and Times of Little Richard, Charles White, 1984
A People’s History of the United States, Howard Zinn, 1980
A Confederacy of Dunces, John Kennedy Toole, 1980
Interviews with Francis Bacon, David Sylvester, 1980
Darkness at Noon, Arthur Koestler, 1980
Earthly Powers, Anthony Burgess, 1980
Raw (a ‘graphix magazine’) 1980-91
Viz (magazine) 1979 –
The Gnostic Gospels, Elaine Pagels, 1979
Metropolitan Life, Fran Lebowitz, 1978
In Between the Sheets, Ian McEwan, 1978
Writers at Work: The Paris Review Interviews, ed. Malcolm Cowley, 1977
The Origin of Consciousness in the Breakdown of the Bicameral Mind, Julian Jaynes, 1976
Tales of Beatnik Glory, Ed Saunders, 1975
Mystery Train, Greil Marcus, 1975
Selected Poems, Frank O’Hara, 1974
Before the Deluge: A Portrait of Berlin in the 1920s, Otto Friedrich, 1972
In Bluebeard’s Castle : Some Notes Towards the Re-definition of Culture, George Steiner, 1971
Octobriana and the Russian Underground, Peter Sadecky, 1971
The Sound of the City: The Rise of Rock and Roll, Charlie Gillete, 1970
The Quest For Christa T, Christa Wolf, 1968
Awopbopaloobop Alopbamboom: The Golden Age of Rock, Nik Cohn, 1968
The Master and Margarita, Mikhail Bulgakov, 1967
Journey into the Whirlwind, Eugenia Ginzburg, 1967
Last Exit to Brooklyn, Hubert Selby Jr. , 1966
In Cold Blood, Truman Capote, 1965
City of Night, John Rechy, 1965
Herzog, Saul Bellow, 1964
Puckoon, Spike Milligan, 1963
The American Way of Death, Jessica Mitford, 1963
The Sailor Who Fell From Grace With The Sea, Yukio Mishima, 1963
The Fire Next Time, James Baldwin, 1963
A Clockwork Orange, Anthony Burgess, 1962
Inside the Whale and Other Essays, George Orwell, 1962
The Prime of Miss Jean Brodie, Muriel Spark, 1961
Private Eye (magazine) 1961 –
On Having No Head: Zen and the Rediscovery of the Obvious, Douglas Harding, 1961
Silence: Lectures and Writing, John Cage, 1961
Strange People, Frank Edwards, 1961
The Divided Self, R. D. Laing, 1960
All The Emperor’s Horses, David Kidd,1960
Billy Liar, Keith Waterhouse, 1959
The Leopard, Giuseppe Di Lampedusa, 1958
On The Road, Jack Kerouac, 1957
The Hidden Persuaders, Vance Packard, 1957
Room at the Top, John Braine, 1957
A Grave for a Dolphin, Alberto Denti di Pirajno, 1956
The Outsider, Colin Wilson, 1956
Lolita, Vladimir Nabokov, 1955
Nineteen Eighty-Four, George Orwell, 1949
The Street, Ann Petry, 1946
Black Boy, Richard Wright, 1945

miércoles, 2 de octubre de 2013

Las bibliotecas más bellas del cine

Las películas también nos hace soñar con... bibliotecas.


Nos acompañas en nuestro recorrido por las bibliotecas más bellas del cine? Seguro que, cuando en una película sale una buena biblioteca, se te van los ojos a ella, aunque en pantalla aparezca la actriz más hermosa o el más arrebatador de los galanes… Seguro que disfrutaste con nuestra selección de las bibliotecas más bellas del mundo, ¡ahora le ha tocado el turno a las bibliotecas de cine!
Por eso, e inspirados en las curiosas propuestas de Flavorwire, se nos ocurre ofrecerte este repaso por las mejores bibliotecas de las películas. Desde La Bella a la BestiEl nombre de la rosa, pasando por My Fair Lady Desperado… 
Biblioteca de Los Tenembaums
La de la adorable Margot de Los Tenenbaums.
Biblioteca de Salma Hayek en Desperado
Salma Hayek trabajaba en una bibliotea en Desperado, ¿o era una librería?
Bilbioteca de El día de mañana
La Biblioteca Pública de Nueva York aparecía así de desoladora en El día de mañana.
Bilblioteca Indiana Jones y la última cruzada
Entre los maravillosos escenarios de Indiana Jones y la última cruzada se encontraba esta biblioteca veneciana que a tantos nos hizo soñar...
Wim Wenders no sólo nos llevó a una biblioteca en El cielo sobre Berlín: nos hizo "escucharla", en una gloriosa escena de aquella gloriosa película.
Biblioteca de Conoces a Joe Black
Anthony Hopkins, paseando por la biblioteca de ¿Conoces a Joe Black?
 Biblioteca de Ágora
Alejandro Amenábar recordó la destrucción de la biblioteca de Alejandría en su superproducción Ágora.
Biblioteca The Fantastic Flying Books of Mr. Morris Lessmore
La fantástica biblioteca de The Fantastic Flying Books of Mr. Morris Lessmore... 
Biblioteca My Fair Lady
La de My Fair Lady y su escalera en espiral...
Biblioteca de Harry Potter
Aunque sólo fuera por la atracción hacia las bibliotecas que Harry Potter ha logrado crear entre los niños, merecería la pena su existencia...
Biblioteca El nombre de la rosa
¿Era una biblioteca o un laberinto la de El nombre de la rosa? Era, sin duda, una de las más atractivas que el cine y la literatura nos han dado...